OPINIÓN

LA REFORMA LABORAL.

El valor de ser tú: ¡Que quien No valora lo que tiene, algún día se lamentará por haberlo perdido y quien hace mal algún día recibirá su merecido. ! Si quieres ser feliz haz feliz a alguien, si quieres recibir, da un poco de ti, rodéate de buenas personas y sé una de ellas. Recuerda, a veces de quien menos esperas es quien te hará vivir buenas experiencias !. Nunca arruines tu presente por un pasado que no tiene futuro. En la vida lo que nos llevamos es nuestras satisfacciones o insatisfacciones, lo material se queda.

La desigualdad y la pobreza detonante social: Tan grave es la enfermedad, que necesitamos una cirugía mayor. Hay Restituirle valores, hábitos. La fuente de este resurgimiento vendrá de los movimientos sociales e intelectuales, que involucran la lucha por conquistas globales y específicas de las comunidades. La realidad es que nuestro país ha sido desmantelado como Estado de bienestar social a un Estado de mercado de un objetivo globalizado a la oligarquía macroeconómica, desde la década de los 80 s.

Las elecciones intermedias serán un buen termómetro para conocer la postura de los electores  y a la respuesta del agravio social que lo cacho AMLO en el 2018 con una votación masiva de más de 30 millones de votos y casi la pulverización de los partidos.

Trascender y no descender como está sucediendo, y no se culpe a los protestatarios, porque esas protestas son culpa de la no atención o de la violencia institucional que se hace en contra del pueblo mexicano y por las injusticias que padece, así que, lo mejor, sería que escuchara otras opiniones y tienen conocimientos y experiencia, a pesar de que el círculo cerrado y elitista que le rodea, piense lo contrario.

Por lo menos anualmente necesitamos un millón de empleos con un crecimiento del PIB al 5 0 7 % y si necesitamos un millón de empleos contra apenas un crecimiento de 350 mil, estamos con un déficit de 650 mil empleos formales que se requieren para estar hablando de una mejora. Se siguen acumulando los desempleados y obviamente esto genera problemas fuertes.

La tasa de desocupación nacional implica una serie de elementos a analizar, entre ellos que la fuerza laboral se encuentra ante un déficit de oportunidades en un país con un nivel de desarrollo desigual, lo que desencadena otros problemas.

El 3.76 % de los mexicanos en edad y posibilidad de trabajar estuvieron desempleados durante el último anos de consecuciones y acciones  por el pacto por México; resultado mayor pobreza y desigualdad que propicio la motivación bifronte contra los partidos.

Las personas con estudios de nivel medio superior y superior se mantienen como el principal grupo entre los desempleados. Son  empleos pauperizados,  porque se tiene un ingreso base de un salario mínimo o un poco arriba de éste, lo que “finalmente no resuelve la problemática sino que lo que están planteando es la generación de una formalización de la pobreza por llamarla de alguna manera.

El «registro sindical» que es una especie de autorización para la existencia legal de un sindicato, es negado sistemáticamente a organizaciones independientes bajo argumentos tales como errores de redacción en su documentación de solicitud del registro. La «toma de nota», que es un documento que otorga personalidad jurídica y reconoce a los representantes sindicales, es negada con argumentos similares a los del registro sindical, aun cuando la organización ya esté registrada.

Esto implica que la organización cae en una total indefensión jurídica, tal como ocurrió con el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) o el sindicato minero, de modo que con esta maniobra la autoridad se adjudica la capacidad de reconocer o desconocer a las dirigencias sindicales, sin importar que hayan sido elegidos por los miembros de dichas organizaciones.

El Secretario de Trabajo otorga registros sindicales a personas de su confianza y propicia la firma de Contratos Colectivos de Trabajo, conocidos como "Contratos Colectivos de Protección Patronal", que ponen en relación a las empresas multinacionales que llegan al país con los titulares de dichos registros, que son verdaderos sindicatos-fantasma.

El 90% de los Contratos Colectivos de Trabajo (CCT) registrados en las Juntas de Conciliación y Arbitraje, son Contratos de Protección Patronal; es decir son una simulación, pues están firmados y gestionados por un supuesto "líder sindical" al margen de los trabajadores quienes, la mayoría de las veces, ignoran que están encuadrados por un CCT y ni siquiera saben que están afiliados a un sindicato.

Permiten una mayor flexibilidad laboral pues sólo incluyen las condiciones mínimas previstas en la ley, y no necesariamente se cumplen en la práctica. Aseguran un control absoluto sobre los trabajadores por parte de la patronal a costa de la libertad sindical y los derechos de los trabajadores.

Estos sindicatos corporativos y de protección patronal no abarcan todos los sectores de la industria y los servicios, pues en algunos de ellos subsisten sindicatos independientes.

Y es así que el Estado se ha dado a la tarea de atacar al sindicalismo independiente desde varios frentes. La estructura institucional le otorga a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social y a las Juntas de Conciliación y Arbitraje amplias facultades para resolver todos los conflictos de orden laboral.

Ambas instituciones dependen directamente del poder ejecutivo, siendo el presidente de la república y, en su caso, los gobernadores de los Estados, quienes nombran a los directivos de estas instituciones, y éstos, a través de una estructura jerárquica designan a quienes ejecutan las funciones de la institución, generando una práctica en la que la lealtad y el sometimiento al jefe están por encima de las leyes.

Existen Juntas Locales que tienen las mismas facultades que la Secretaría del Trabajo; es decir, otorgar registros, tomas de nota y demás trámites relativos a la existencia de sindicatos, además de que en ellas se dirimen los conflictos de carácter individual y colectivo.

La Junta Federal tiene la función de atender los conflictos individuales y colectivos de la industria considerada estratégica: energía, telecomunicaciones, automotriz, petróleo, alimentación, entre otras, y de las entidades administradas por el Estado. Con estas "herramientas" el sistema desarticula organizaciones que además de no estar inmersas en el sistema de control corporativo, implican un serio obstáculo para privatizar industrias estratégicas, como ocurre con el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME).

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *