Representantes de los diferentes órdenes de gobierno, acompañados de familiares del General de División, José María Donato Guerra Orozco, se dieron cita en la Rotonda de las y los Jaliscienses Ilustres, para conmemorar el CXCII aniversario de su natalicio.
Un relevante acontecimiento, si se parte de que, la mayoría de los próceres erigidos en las efigies, sus restos descansan en este monumento.
No es el caso del homenajeado cuyos restos mortales reposan en la Rotonda de los Hombres Ilustres del panteón civil de Dolores, en la Ciudad de México.
Nacido en el municipio de Teocuitatlán de Corona, el 22 de octubre de 1832; es considerado un héroe nacional, un hombre cabal, sin mancha.
Los valores que identifican a este ilustre jalisciense fueron expresados por su bisnieto el Dr. Héctor Gómez Vidrio Guerra, “la historia lo identifica como un hombre sin tacha y sin miedo, de gran valor y muchas cualidades; un hombre intrépido en los combates, prudente y hábil a la hora del consejo, leal como el mejor, desinteresado como ninguno, honrado y sin mancha”.