INVESTIGACIONES REVELAN PROPIEDADES DEL VENENO DE ABEJA CONTRA EL PARKINSON.
El veneno con el que algunas abejas se defienden de los depredadores, tiene efectos positivos contra el mal de Parkinson, la segunda condición neurodegenerativa más frecuente en México.
Investigadores y estudiantes del Centro Universitario de Ciencias Biológicas y Agropecuarias (CUCBA), de la Universidad de Guadalajara (UdeG), desde hace un año realizan estudios para conocer las propiedades de este veneno, y los primeros hallazgos muestran que preserva la capacidad motora y la memoria a corto plazo.
Parte del trabajo ha consistido en inducir el estado parkinsónico en roedores de laboratorio; lo anterior a partir de una droga derivada de las anfetaminas, la cual provoca la degeneración de las neuronas dopaminérgicas en el tallo cerebral.
En los humanos, cuando se presentan signos de Parkinson, las dopaminérgicas son las neuronas que mueren, explicó la investigadora del Departamento de Biología Celular y Molecular del CUCBA, doctora Silvia Josefina López Pérez –una de las realizadoras del proyecto–.
Una vez que los animales desarrollaron Parkinson, los estudiosos aplicaron apitoxina, que es el veneno de abeja, obtenido en el CUCBA. Posteriormente, a los roedores les realizaron diversas pruebas; una consiste en aplicarles otra droga, que las hace dar giros.
“Cuando ponemos el veneno de abeja, esa conducta casi desaparece, no del todo, pero tal vez un 90 por ciento del giro desaparece”, informó López Pérez.