LA 4T SUSPENDE OBRAS DE INFRAESTRUCTURA EN SALUD.

Por: Salvador Mateo, vocero del Movimiento Antorchista en Jalisco.

La construcción de instalaciones sanitarias como Centros de Salud, hospitales, el equipamiento de los nosocomios, así como, el apoyo con médicos y medicinas para que los mexicanos más marginados y olvidados de nuestra Patria accedan a servicios de salud suficientes y de calidad, a los que tiene derecho todo mexicano y ser humano, han sido parte de las demandas más importantes que viene enarbolando el Movimiento Antorchista, desde hace más de cuatro décadas, ante los diferentes niveles de gobierno.

Como se ve la lucha de los antorchistas en materia de salud no es reciente, ésta ha sido dada, de manera ininterrumpida, en el transcurso de varias Administraciones Federales, en la que el antorchismo se ha visto en la necesidad, no solo de realizar infinidad de gestiones, sino de recurrir al Derecho Constitucional de manifestación  y denuncia pública para hacer que el estado mexicano cumpla con su obligación de dotar y/o mejorar la cobertura de los servicios de salud. Está claro que los reclamos fueron hechos ante gobiernos de distintas filiaciones políticas, sobre todo los de extracción priista.

Por lo anterior, los que militamos orgullosamente en las filas de Antorcha no se nos puede acusar de habernos quedado callados en los sexenios anteriores en los que hubo, sin lugar a dudas, graves descuidos y baja inversión para el sector salud. Asimismo, es del conocimiento público que hemos luchado incansablemente y seguiremos luchando para que los mexicanos, en especial para los que crean directamente con sus manos la riqueza de este país,  tengan servicio médico integral y gratuito ya que, está claro que un trabajador sano es más productivo, que uno enfermo y con pocas o nulas posibilidades de curarse, con el mísero salario que percibe, el que como es sabido en México es de los más bajos a nivel mundial.

En este sentido los que deseamos con todas nuestras fuerzas una Patria más justa, en cumplimiento de la honrosa tarea que nos hemos echado a cuestas, tenemos la obligación ineludible de desenmascarar el carácter antipopular, de corte neoliberal del autodenominado gobierno de la CUARTA TRANSFORMACIÓN que encabeza el presidente Andrés Manuel López Obrador quien, contrario a lo que pregona en sus discursos de «Por el bien de todos, primero los pobres», no solo ha hecho recortes presupuestales para la compra de medicinas y equipamiento médico,  recortes de personal en el IMSS, ISSSTE, entre otras Instituciones de salud, sino también ha suspendido importantes obras de  infraestructura en salud que se iniciaron en pasadas Administraciones  Federales.

Tan solo en Jalisco, se cancelaron ocho obras de sustitución, otras siete de ampliación y fortalecimiento, y cuatro más correspondientes a nuevos trabajos o proyectos, entre las que se encuentran la ampliación del Hospital Regional de Ameca, que tenía proyectados 30 millones de pesos para el crecimiento de las áreas de  quirófano, tomografía, laboratorios y urgencias, entre otros espacios. Las autoridades federales también pausaron  la construcción de los hospitales comunitarios de Arandas y Cihuatlán. El primero,  con un presupuesto de 25 millones de pesos, el segundo con 20 millones de pesos. De los 47 hospitales parados en el país, 10 se ubican en la entidad, de esta manera el Estado ocupa el primer sitio a nivel nacional con este rezago. Estos datos están disponibles en los portales de varios medios de comunicación, mismos que están basados en los informes de la Secretaría de Salud Jalisco.