El gansito, Pancho Pantera, Chester Cheetos, Tigre Toño, Osito Bimbo y Carlos V son tan sólo algunos personajes que han sido iconos de marcas de productos alimenticios, y que dentro de poco tiempo dejaremos de ver en los empaques.
Esto, tras la publicación de la Norma Oficial Mexicana 051, de la Ley General de Salud, por parte del gobierno federal, que obliga a las empresas a incluir sellos negros octagonales en sus productos para advertir a los consumidores que éstos son altos en calorías, sodio, grasas trans y saturadas, y azúcares.
Sin embargo, esta disposición también incluye la desaparición de personajes que incentiven la compra de dichos alimentos procesados.
“Los productos preenvasados que ostenten uno o más sellos de advertencia o la leyenda de
edulcorantes, no deben: a) incluir en la etiqueta a personajes infantiles, animaciones, dibujos animados, celebridades, deportistas o mascotas, elementos interactivos tales como juegos visual–espaciales o descargas digitales que, estando dirigidos a niños, inciten, promueven o fomenten el consumo, compra o elección de productos con exceso de nutrimentos críticos o con edulcorantes”, refiere el capítulo 4.1.5 de la norma.