ASUNTOS DEL ESPACIO n= NPhvi
Lo crea usted o no , cada 15 de marzo se celebra el Día Mundial del Contacto, para establecer una comunicación interplanetaria para asuntos del espacio. Suena a ciencia ficción , pero es real, siga leyendo que le quiero explicar por qué estos asuntos del espacio están más vigentes que nunca.
La celebración de esta efeméride viene de muy atrás en el tiempo, pues fue declarada por la organización International Flying Saucer Bureau (IFSB), en marzo de 1953. Por muy extraño y curioso que parezca, la intención de la creación de este día mundial fue la de enviar un mensaje al espacio cruzando las barreras del planeta.
PRIMER INTENTO
El primer intento serio que hizo la Humanidad por comunicarse con civilizaciones extraterrestres tuvo lugar el 3 de marzo de 1972, con el lanzamiento del Pioneer 10 desde Cabo Kennedy.
La colocación de un mensaje a bordo del Pioneer 10 es algo similar a la botella que lanza al océano el marinero que ha naufragado, botella con un mensaje en su interior, con la esperanza de que llegue a manos de alguien. Pero el océano espacial es muchísimo más vasto que cualquier océano de la Tierra.
SIGUIENTES INTENTOS
Nuestra civilización ha enviado cinco objetos fabricados por el ser humano al espacio interestelar: los Voyager 1 y 2, los Pioneer 10 y 11 y el New Horizons. Este mero hecho denota nuestro potencial ilimitado para aventurarnos a lo desconocido.
Durante milenios, los humanos han viajado hasta los lugares más recónditos del planeta buscando vidas diferentes o mejores, o simplemente explorándolo.
Los últimos seres humanos que pisaron la Luna regresaron en 1972. Desde entonces, centenares de humanos han ido al espacio, pero sólo a orbitar alrededor de la Tierra, a unos cientos de kilómetros de la superficie ,pero ahora es diferente.
DE LAS GUERRAS ESPACIALES Y OTROS VIAJES
En los últimos veinte años, sobre todo en los cinco últimos, el cielo nocturno se ha vuelto mucho más interesante y tentador para los exploradores de las potencias mundiales.
El Universo es vasto y a la vez pavoroso y por vez primera estamos formando parte de él de manera protagónica. Nunca como ahora, lo que veíamos con incredulidad e ingenuidad formaría parte de nuestra historia de contacto espacial.
Probablemente no hay ninguna época en la historia de la Humanidad que haya sufrido tantas variaciones y cambios como en el presente siglo XXI en cuanto al poder militar espacial se refiere, aunque estemos en pañales.
Lo estamos viendo y viviendo en carne propia con la guerra de Rusia y el desabasto de los motores para las naves espáciales ocasionado por estos y sus declaraciones que ahora vuelen en el espacio en sus escobas los otros tripulantes del universo y la respuesta norteamericana con Elon Musk que sus “escobas”, si vuelan.
Carl Sagan escribió una vez : “Creo que el control militar de los vuelos espaciales con presencia humana, que ya se practica en la Unión Soviética –y es tema de debate en los Estados Unidos– es un paso que deben apoyar todos los que se titulan defensores de la paz. Me temo mucho que las organizaciones militares de los Estados Unidos y de la Unión Soviética son organizaciones con formidables intereses creados en cuanto se refiere a la guerra”. Y sus palabras en este siglo resuenan con fuerza como un presagio de lo que estamos viviendo.
Lo que usted leyó fue escrito el siglo pasado, y lo escribió, justo después de haberse lanzado el disco de oro interplanetario, explicando al universo a través de un mensaje, que somos agentes de paz.
Por cierto que en estas cuestiones de paz, Las Naciones Unidas ya han establecido tratados y principios sobre el espacio desde el año de 1966 a la fecha, con mayor empuje en el año 1997.
En su Artículo IV, habla que la Luna y los demás cuerpos celestes se utilizarán exclusivamente con fines pacíficos por todos los Estados Partes en el Tratado. Si se pregunta qué países firmaron dicho tratado, son los Gobiernos de los Estados Unidos de América, del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte y de la Unión de Repúblicas
Socialistas Soviéticas.
Quedando de acuerdo en no establecer en los cuerpos celestes bases, instalaciones y fortificaciones militares, efectuar ensayos con cualquier tipo de armas y realizar maniobras militares.
Pero si usted como yo se está preguntando si esto es viable, la respuesta es no.
La historia de la exploración de la superficie de la Tierra y al espacio, ha sido principalmente una historia militar.
Son las restantes tradiciones militares las que para nosotros representan hoy día un peligro pues los conflictos entre Ucrania y Rusia están repercutiendo en el mundo del espacio y en el mundo terreno.
CONCLUYENDO
La amenaza de una guerra desde el cielo está patente. Aquí es preciso hacerse una pregunta muy seria sobre si se podrá lograr semejante contacto espacial con otros planetas, antes de que nos destruyamos con las fuerzas
tecnológicas que ha desarrollado nuestra “inteligencia”.
Y este día del contacto, debemos aprovecharlo para darle un contacto no fuera de este mundo, sino dentro de nosotros, donde encontraremos La fórmula de la Paz, n= NPhvi.
