Salinas, San Luis Potosí, a 22 de mayo de 2019.- Le dicen “El Tajo”, antes fue un agostadero donde los animales pastaban en busca del poco alimento de la zona, pues se trata de una superficie por demás árida, pero ahí en medio de ese paisaje donde predomina el matorral desértico, micrófilo, izotal, cardonal y nopalera, los jóvenes de la zona están construyendo la esperanza de una vida mejor: Un brazo robot con movilidad para quien carece de esa extremidad.
Uno de ellos es Luis Roberto Villa Salas, de 21 años, estudiante de la carrera de Ingeniería de Sistemas, en la Coordinación Académica Región Altiplano Oeste de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, mejor conocido como “Campus Salinas”, a donde ingresó en 2016 y donde se preparan cientos de estudiantes provenientes de los municipios de la región.
Joven modesto, estudioso, luchador, aferrado, dirían sus amigos, pues ya desde el bachillerato que cursó en el Cebetis 186, ya le gustaba la programación; por lo que no les sorprendió que Luis Roberto obtuviera el Segundo Lugar en la XIX Semana del Instituto de Investigación en Comunicación por Óptica, donde el Doctor Alfonso Lastras, destacado investigador y director del IICO, lo distinguió con dicho reconocimiento en el Concurso de Instrumentación y Electrónica.
Un mundo sin manos
El panorama es promisorio para su propuesta, se trata de dar opciones a los que tienen algún tipo de discapacidad que debido a una enfermedad o accidente pierden un miembro, brazo o pie y se enfrentan a un mundo con muchas dificultades.
