OPINIÓN

LOS ORÍGENES DE LOS RESTAURANTES

Una Perspectiva Sociológica, Arqueológica y deliciosa…

Por Mariana Navarro Macías

Si usted supiera cuán deliciosa es la palabra restaurar, seguro que salvo que tenga hambre cuando me lee, no lo imaginaría, como le aseguro que no se imaginaba que un restaurante procede del bello arte de restaurarle a usted.

Y es que cocinar, es una forma de decir ‘te amo’ con ingredientes, ya lo dice el adagio; y un restaurante, a usted, simplemente lo restaura. Acompáñeme a descubrir este hallazgo culinario.

LA ALQUIMIA DE LA COCINA

La cocina es la alquimia de amor, decía Guy de Maupassant, célebre escritor francés del siglo XIX, reconocido por sus cuentos y novelas, que a menudo exploraban la naturaleza humana, las costumbres sociales y su amor a la cocina. Pero vámonos un poco más atrás en el tiempo.

En 1765, un mesonero llamado Dossier Boulanger abrió una casa de comidas en París y colocó un letrero en latín que decía: «Venite ad me vos qui stomacho laboratis et ego restaurabo vos», que traducido significa «Venid a mí casa hombres de estómagos cansados que yo los restauraré».

Esta simple frase no solo atrajo a muchos comensales, sino que también marcó el nacimiento de una nueva era en la historia de la gastronomía mundial: el surgimiento del restaurante.

Además, permítame decirle que, en épocas pasadas, al llegar a una posada o mesón (que así se llamaban los sitios a comer), no había más que un solo platillo, a través de este personaje, pudo brindar opciones a sus comensales y degustar de varios platillos y postres.

EL CONTEXTO HISTÓRICO

El siglo XVIII fue un periodo de grandes cambios sociales y culturales en Europa.

La Ilustración trajo consigo una valorización del conocimiento, la educación y la ciencia, impactando todas las áreas de la vida, incluyendo la gastronomía.

En este contexto, la iniciativa de Boulanger no solo fue innovadora sino también revolucionaria. Hasta ese momento, la mayoría de las comidas públicas se servían en tabernas o en los hogares de la aristocracia.

La idea de un lugar dedicado exclusivamente a ofrecer comida a cualquier persona dispuesta a pagar por ello era una novedad.

El éxito del establecimiento de Boulanger fue tal que no solo se popularizó en toda Francia, sino que también cruzó fronteras.

En 1794, el refugiado francés Jean Baptiste Gilbert Paypalt llevó el concepto de restaurante a Estados Unidos, fundando el primer restaurante francés en este país, conocido como Julien’s Restorator.

Esta expansión global del concepto es un testimonio del impacto cultural y social que los restaurantes comenzaron a tener en las sociedades modernas.Restaurant Belossi

LA EVOLUCIÓN DE LA COCINA Y LA REPOSTERÍA

Boulanger no solo es conocido por haber abierto el primer restaurante, sino también por su talento en la repostería.

Su éxito con los postres fue tal que las panaderías en Francia adoptaron su apellido, denominándose «boulangeries».

Este hecho refleja cómo los individuos y sus habilidades culinarias pueden dejar una marca duradera en la cultura gastronómica de un país.

La profesionalización de la cocina y la repostería permitió que los chefs de renombre, quienes previamente trabajaban exclusivamente para la realeza y la nobleza, abrieran sus propios negocios, democratizando el acceso a la alta cocina.

Y bueno usted dirá y donde empieza eso de restaurarle a uno pues lea más adelante que ya le cuento.

LA NOBLE MISIÓN DE RESTAURAR

Una curiosidad fascinante de esta historia es la misión intrínseca que parece haber en los restaurantes: la de «restaurar el ánimo, la sonrisa y la salud» de sus clientes.

Esta misión, aunque pueda parecer romántica, tiene profundas implicaciones sociológicas:

Los restaurantes no sólo alimentan el cuerpo, sino que también juegan un papel crucial en el bienestar emocional y social de las personas.

Son lugares de encuentro, de celebración y de consuelo. ¿Cuántas veces no hemos encontrado alivio en un plato bien preparado después de un día difícil?

Es importante reflexionar sobre el valor y la nobleza del trabajo de aquellos que forman parte del mundo de la gastronomía.

Los cocineros, desde los chefs de renombre hasta las cocineras de pequeñas fondas, desempeñan un papel fundamental en nuestra vida diaria.

Ellos no sólo preparan alimentos; crean experiencias, generan recuerdos y contribuyen a nuestra felicidad y bienestar.

CONCLUYENDO

El impacto de Boulanger y su casa de comidas en 1765 se extiende hasta nuestros días.

Los restaurantes, en todas sus formas y tamaños, son ahora una parte esencial de la vida moderna en todo el mundo.

La historia de su origen nos recuerda la capacidad humana para innovar y crear espacios que no solo satisfacen necesidades físicas, sino también emocionales y sociales.

Celebrar esta historia es también un homenaje a todos aquellos que, con su trabajo diario, continúan la noble misión de restaurar nuestros cuerpos y almas.

Así, el legado de Boulanger perdura, invitándonos a valorar y respetar cada plato y cada sonrisa servida en una mesa, ya sea en un restaurante de lujo o en una modesta fonda de barrio.

La próxima vez que disfrute de una comida fuera de casa, recuerde la rica historia que hay detrás de esa experiencia y agradezca a quienes hacen posible que cada bocado sea un momento memorable.

La paciencia y dedicación del personal de un restaurante son cualidades que merecen reconocimiento y aprecio.

Porque ellos conforman de alguna manera, un legado duradero y algo que usted no solo conserva en su estómago, sino también en el corazón.