“El jarabe tapatío” quizá es el tema más popular que todo mariachi interpreta en el mundo; pero, a decir de los investigadores, no sólo es de Jalisco, sino nacional; situación de orgullo en el marco del 480 aniversario de la fundación de Guadalajara, que se recuerda este 14 de febrero.
Historias del campo, amores y desamores, fiestas y más son los hechos que se narran y bailan a través de 15 sones y jarabes primigenios de los que muchos no se conocían pero que, gracias al trabajo de académicos del Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño (CUAAD) de la UdeG, se han rescatado para legarlos a la cultura popular de Jalisco.
Se trata de obras que se han creado desde 1928 hasta la actualidad, y que cobran relevancia musical, dancística y estética en cuanto a la indumentaria de quienes los bailan.
Desde hace seis años se ha trabajado en el rescate de estas obras, declaró el doctor Ismael García Ávila, profesor investigador del CUAAD.
“Son 15 sones patrimoniales que restauramos a través de un equipo de trabajo y que se empezaron a articular de 1928 a la actualidad a través de tres grandes maestros de la danza (Francisco Sánchez Flores, María del Refugio García Brambila ‘Miss Cuca’ y Elisa Palafox)”, externó.
Estos temas musicales son “Las copetonas”, “El son de la Negra”, “El jarabe de Jalisco” (Jarabe largo ranchero), “El maracumbre”, “La madrugada”, “El enamorado”, “La jota tapatía”, “Las alazanas”, “La costilla jalisciense”, “La iguana”, “El pitayero”, “El caballito”, “La culebra”, “Los machetes” y “El jarabe de la botella”.