¿EN QUE SE TRADUCE EL LÍMITE A LA TECNOLOGÍA?

2023-03-02 Vigaro

Литэратура#6 Por: Carlos Martínez Valadéz

Año 2000 los infantes que nacieron entonces; y en años sucesivos han visto su desarrolló y conocimiento de la vida y del resto de las personas inmersos en la tecnología móvil de comunicación; en el abuso de efectos por computadora en las películas y los aberrantes videojuegos en la creencia de que la –IA- inteligencia artificial regirá nuestros destinos; se han criado en la convicción de que la tecnología cuántica dominará nuestras vidas y tal concepto se consolida con la enorme propaganda –ciencia ni tan ficción- que abunda en el internet; internet que forma parte de sus vidas así como las redes sociales y cuya generación no concibe “como sería la vida sin estas tecnologías”. No logran entender –me consta- cómo la sociedad de hace 60 años “se las arreglaba” sin estos medios. -Aclarando que en lo personal no estoy en contra de la tecnología; la cual me admira… Lo que critico es la manera en que las tecnologías son orientadas y cuyos usuarios –se pierden- en ese mundo dejando de lado la objetividad volviéndose maniqueístas: “ustedes están retrasados y desfasados… nosotros estamos en consonancia con los avances tecnológicos y por ende somos inteligentes”.

Esta generación sin conocimiento (o ni tan inteligentes) del año 2000 no se cuestiona que la historia tiene miles de años… Ellos creen que la historia se empezó a escribir cuando nacieron. Si esa impronta mental delinea su criterio y toma de decisiones ¿Qué mentalidad, liderazgo y abuso podemos esperar de los que nacen en este año 2023? Esta generación está convencida de que les esperan 1000 mil años de evolución y avances tecnológicos “insospechados” en la utopía del súper hombre, el ciborg, el chip cerebral o un ejército de terminators o humanoides en sus exoesqueletos aplicando vacunas para los virus tecnológicos invasivos del siglo XXII, que por ende hará más realidad lo que en su momento se etiquetó de futurista y de paso actualizando el conocido axioma -del hombre como enemigo del hombre-… ¿o será la computadora enemiga del hombre? Justo aquí en esta página encontrará un artículo que dice que no se debe temer a la –IA- inteligencia artificial; porque solo “esta creado para auxiliar y ayudar dado que atrás hay un grupo de personas dirigiendo su proceder”. Lo cual confirma lo que aquí expreso: “Los innovadores tecnológicos van a topar con pared…” pues –ese proceder- tiene caducidad, dado que los seres humanos son vulnerables y dependientes el sistema de la electricidad… basta un terremoto o la tormenta perfecta para que todo se vuelva inútil.

A propósito de lo anterior, aquí un estrato de la cosmogonía maya quienes sabían de los ciclos repetitivos de las cosas: “El tiempo era considerado una serie de ciclos sin principio ni fin, interrumpidos por cataclismos o catástrofes que significaban el retorno al caos primordial. Pero nunca se acabaría el mundo porque creían en la palingenesia, la regeneración cíclica del universo. Los libros del Chilam Balam exponen predicciones acerca de esos ciclos de destrucción y renacimiento…”

Lo cual aplica a la tecnología, según se evidencia en la historia antigua.

Este espacio se titula “Leyendas Desconocidas 1859 – 1959” y el lector… La lectora se preguntará ¿Qué tiene que ver este tema tecnológico y generacional con las leyendas? La especie humana se considera que tiene en el planeta 300,000 mil años (del homínido al homo sapiens) y en este universo humano disperso en los 45,000 mil kilómetros que tiene nuestro mundo habitable, las historias, cuentos y leyendas siempre han existido y aún más cuando hace 5,200 años se dio la invención de la escritura (el primer escrito que se conoce se encontró procedente de los sumerios en Mesopotamia del año 3000 antes de nuestra era) con la cual tales historias pudieron registrarse… Cuenta la leyenda, de entre las tribus nómadas paganas y ante la ignorancia del porqué de los fenómenos meteorológicos y naturales la creencia de que una deidad o grupo de deidades, que con el tiempo derivó en teocracia eran los responsables de tales manifestaciones; entes a los que había que aplacar cuando se enojaban: terremotos, huracanes, erupciones, relámpagos… fuego en los bosques.

Al paso de los siglos la costumbre ritual de los sacrificios humanos –para satisfacer a los demonios- formó parte de la cosmogonía de los pueblos antiguos. La leyenda sin tiempo, propia de los países escandinavos, muy antigua describe humanoides alados o voladores que circundaban el cielo, sus giros y planeos un conflicto en las alturas… una guerra entre las nubes. ¿Qué clase de seres eran aquellos? ¿Por qué entre sí? A ojos actuales la pregunta es: ¿Qué tecnología los mantenía en vuelo; eran alas biológicas o algún artefacto? ¿Una máquina siglos antes de la invención de la escritura? Tal narrativa llegó a conocimiento de la cultura micénica –Grecia- y en inspiración a la naciente mitología concibió el mito de Ícaro a quien se le fundieron las alas hechas con cera cuando se acercó a gran altura cerca del sol (metáfora insignia que da a entender que la tecnología que hizo viable el volar, se anuló). Pero este ejemplo histórico milenario no es el único: Zoroastro, anunnaki, lammasu, bodhisattvas, garuda, anamchara, ángeles y los elohim. Sumeria, Egipto, Roma, India y Grecia, son las culturas que hacen mención de seres alados. Lo importante y congruente con lo que aquí se escribe es la relación del fin de una tecnología (su tecnología), en tiempos antiguos. ¿Por qué sucedió así?

Existen dos poderosas razones: Una, no la puedo mencionar por su naturaleza soterrada (y que se relaciona con estos seres alados de la antigüedad) y la otra que sí puedo escribir se refiere “a los niveles permisibles que la especie humana puede tener” con la intención de darle un sentido tangible a la humanidad cuando los individuos realicen una retrospectiva de sí mismos. (Historia). Va un ejemplo entre miles:

En Irak, Bagdad en la colina de Rabua ya conocían la electricidad 4,000 años atrás y crearon elementos materiales para reproducirlo, “envasarlo” y aplicarlo… toda esta estructura se perdió.

Los romanos ya construían y trabajaban con efectos prácticos en su urbanización del siglo III antes de nuestra era, mecanismos hidráulicos para fines hidrodinámicos: llaves, canales, desagües, tuberías, fuentes, bombas… Todo eso entró en pausa hasta el siglo XVII en que los franceses los usaron para construir Versalles en 1643.

La Cultura Maya construyó hace 3,500 años las pirámides al sur de nuestro país; su calendario, conocían la bóveda celeste; excelentes matemáticos y eran disciplinados con sus técnicas. Algo de eso se observa en “la lápida de palenque” que alude a lo aquí mencionado de “los seres alados” y que fue descubierto en 1953. Los mayas aceptaban la palingenesia, o la finalidad y regeneración de las cosas…

Todo eso se perdió.

¿En que se traduce el límite a la tecnología? En que existe “una permisividad” para que la especie humana “descubra” “invente” “evolucione” y aplique tales invenciones… hasta un periodo de tiempo permisible… se extingue y vuelve a empezar; lo que explica los estratos o segmentos divididos en el tiempo de nuestra humanidad; pero… los límites para esta ocasión del siglo XXI hasta antes del 2050 son determinantes porque el fenómeno (lea el artículo anterior, sobre la extinción de las civilizaciones) que está hibernando en nuestra especie esta por manifestarse. La tecnología súbitamente se volverá un ente obsoleto, absurdo, superfluo, vano, inválido e inútil. Lo que tomará su lugar es genuinamente omnipotente. Nuestra actual civilización tecnológica “solo” tiene apenas 300 años.

Mis entelequias aquí escritas no son parte de “catastrofismos” o ansias de conspiracionismo; son resultado de la convergencia en la información disponible y de dominio público. (El tema de -fenómeno en hibernación- es resultado de una investigación más profunda que de momento, no daré a conocer) (Cuando hablo de –permisividad- lo lógico es preguntarse: ¿Quién otorga ese permiso? y esa información también no la daré a conocer).

El Dataismo (no confundir con dadaísmo que fue un movimiento contracultural y/o de provocación a las artes que surgió en Zurich en 1916) es la vía o filosofía practica que conduce a la humanidad a esos límites. ¿Inteligencia Artificial, leyes cuánticas, erradicación de las enfermedades, aplicación cuántica? Eso no será posible.

El dataismo es una palabra utilizada por primera vez por el periodista canadiense David Brooks quien aquí lo dice:

«Si me pidieran describir la filosofía al alza de hoy en día, yo diría que es el dataísmo», escribió David Brooks en el New York Times en febrero de 2013. Brooks argumentaba que, en un mundo con cada vez mayor complejidad, confiar en los datos puede reducir los sesgos cognitivos y «alumbrar patrones de comportamiento que todavía no hubiéramos percibido». Fuente: Wikipedia.

Para concluir y consolidar este ramillete argumentativo; “La leyenda del origen” que data del 13,000 antes de nuestra era, por la Cultura Anasazi transmitida vía oral y posteriormente escrita dice:

En el principio de los tiempos, un ente biológico pobló la tierra recién formada, cohesionada y amalgamada de secretos para que los nuevos vivos los descubrieran al paso de miles de siglos. Así fue, pero eran tiempos tiernos. No era el momento. Los descubrimientos del presente y pasado tenían que ser pausados.

La especie, creados en dualidad ignorantes del porqué de su existencia despiertan a un nuevo sol con total incertidumbre y miedo; sus tratos son conflictivos… no saben que hay más allá de lo que su mirada observa. Sienten que algo se perdió; que algo se quedó atrás…