ORBEPOLÍTICA

ARDE ÁFRICA Y SUS PAÍSES.

ADDIS ABEBA.-El fiscal general de Etiopía acusó el lunes a miembros de alto rango de los servicios de seguridad de ordenar un ataque contra el nuevo primer ministro y anunció una serie de arrestos e investigaciones que impactaron en el corazón del establecimiento.

Berhanu Tsegaye dijo que la evidencia mostró que «la dirección principal de la agencia de seguridad nacional» les dijo a los miembros del grupo étnico Oromo del primer ministro Abiy Ahmed que lo atacaran en un mitin en junio, una afirmación en un país diverso recientemente sacudido por enfrentamientos étnicos.

Bajo otras investigaciones, agregó Berhanu, se han emitido órdenes de arresto contra 36 agentes de seguridad acusados ​​de abusar de los presos, y por más de 30 funcionarios de una firma dirigida por militares, donde dijo que las investigaciones habían descubierto mala administración.

El Servicio Nacional de Inteligencia y Seguridad (NISS) o con el conglomerado industrial nombrado por el fiscal general – Metals and Engineering Corporation (METEC) no pudo confirmar las versiones.

Las acusaciones contra los servicios de seguridad y METEC, un actor clave en la economía dominada por el estado y los militares, golpearon los dos pilares del poder hasta que Abiy asumió el cargo en abril.

Desde entonces, Abiy ha impulsado una serie de reformas radicales que han desafiado el predominio de los servicios de seguridad y han anulado políticas y jerarquías que han estado en vigencia desde que su coalición EPRDF en el poder asumió el poder en 1991. Se comprometió a abrir sectores estatales a los inversionistas y reconoció la brutalidad policial generalizada que comparó con el terrorismo de estado. También ha hecho las paces con la vecina Eritrea y ha anunciado indultos para los previamente rebeldes Oromo y otros grupos.

Un ataque con granadas mató a dos personas en un mitin en Addis Abeba en junio, poco después de que Abiy abandonara el escenario.

Las autoridades arrestaron a cinco personas en septiembre, diciendo que eran miembros del exiliado Frente de Liberación Oromo que Abiy había indultado. «La evidencia que reunimos muestra que el liderazgo de la agencia de seguridad nacional instruyó a Oromos para llevar a cabo el ataque porque significaría que el primer ministro, un Oromo, fue asesinado por Oromos», dijo el fiscal general en una conferencia de prensa. «Daría (también) la impresión de que no está respaldado por la población Oromo».

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