EL MISTERIOSO PLANO DE LA MUERTE

Литэратура # 40

Por: Carlos Martínez Valadez

Atardece… Una joven mujer permanece de pie, en la orilla del mar con los pies hundidos en la arena y a cada marejada sus pies son acariciados por la tibieza del agua. Un suave viento a barlovento se fija en sus mejillas mientras mira al lejano horizonte. El sol desciende y parvadas de aves se dibujan en el cielo cobrizo.

Su mirada se confunde con la imagen de su mente que a intervalos se fusiona con su cruda realidad: El médico le dijo honesta y directamente después de varios estudios realizados durante semanas, que su enfermedad es terminal… no hay nada que hacer… cuatro, máximo cinco meses le restan de vida. El médico, empático, la mira a los ojos… le dice: “Vívalos en plenitud”.

¿Qué es vivir en plenitud? Sola, con la brisa marítima, ensimismada, reflexiva… resignada con mis pensamientos. ¿Acaso debo ir a una reunión social; una fiesta, beber licor… drogarme, tener sexo con extraños hasta el amanecer? Si el médico no me hubiera aconsejado tal cosa; entonces sí estaría viviendo en plenitud, pues no sabría que mi vida tiene un límite anunciado. Absurdo, inútil… injusto.

Ella leía que según dicta la Psicogenealogia* las generaciones heredamos de familiares en el árbol de la vida tendencias, rasgos, humores, carismas y males que se transfieren al paso de decenas de años. ¿Quién fue mi bisabuela? ¿Cómo y quiénes eran mis parientes de hace 150 años? El medico diagnostico una mal hereditario. Esta maldición nos persigue: Mi padre falleció alcoholizado, dos de mis tíos en un accidente de trabajo, mi hermano muere por diabetes, una sobrina se quita la vida… mi madre, se me fue triste por una depresión. Ella no soporto que nos hayan embargado la casa. Me quede sola… ¿A dónde voy, con quién?

Microscópicas esferas de plata** están incrustadas en diferentes órganos de mi cuerpo (así nací) y han alterado su funcionamiento creando déficit metabólico. A mis 21 años de edad estoy por padecer anemia hemolítica… la muerte. ¿A quién de mi familia del pasado, le dio por contaminarse de gránulos de plata? ¿Por qué a mi? Todavía no puedo creer lo que me pasa.

Después de dos días de deambular por la playa, decide averiguar cuál es la verdadera causa de sus males. Anuncia a su amiga y a la tía de ésta con quienes llegó de retiro para reflexionar ante la pérdida de su progenitora, que se regresa a la ciudad a trabajar y a buscar una cura a su enfermedad. Era la primavera de 1977. Sus ahorros se agotan e inicia una cruzada de investigación contra reloj… su intención, al paso de los días se convirtió en pasión; su pasión al paso de los días se convirtió en obsesión.

Hurgo en la maleta donde su madre dejó escritos, cartas, documentos, fotografías… pregunto a vecinos, a familiares lejanos desconocidos, comparó papeles del registro civil… le leyeron las cartas, las runas y el café. Consulto con un especialista sobre genealogía y aportó datos para la búsqueda en la línea de su árbol de vida****. Hablo con un veterano abogado conocido de la familia, quien se mostró parco a las preguntas. Fue a la hemeroteca: ¿Cómo era la sociedad hace 150 años?

Dice la leyenda que sus descubrimientos fueron sorprendentes, hasta que accidentalmente vio un doble fondo en el veliz donde su madre guardaba sus pertenencias, se encontró con varias fotos viejas en color sepia debido al tiempo allí guardadas. Intrigada, pues no reconocía el lugar, ni a las personas allí plasmadas se fue a una mesa, se acercó una luz, una lente de aumento y… después de bastantes minutos barajando las 13 fotografías… asombrada se vio a sí misma en una foto de grupo con otras personas que no reconoció… ¿Cómo? miro al reverso, con letra escrita a mano se lee: “Cambio de administración, Reunión con el nuevo personal. Tesorería de la U. V. A. al Estado. Guadalajara, septiembre de 1929”.

¿Qué es esto? ¿Qué es U. V. A? ¿Quién es esta mujer idéntica a mí? De pronto el tiempo fluye con prisa… no supo cuánto tiempo le resto a su cuenta regresiva. Absorta veía una y otra vez su imagen en esa foto. La mente se confunde y busca en sus recuerdos. ¿Acaso la reencarnación existe?

Resuelta, al día siguiente acude a los archivos municipales, entonces aún ubicados en el edificio de la Biblioteca del Estado puesta en servicio en 1957 por el entonces gobernador Agustín Yáñez, en Calzada Independencia y Av. Constituyentes zona parque Agua Azul. Pregunta aquí y allá. “Buenas tardes, disculpe estoy buscando una información para mi tesis… ¿Podría decirme que es la U. V. A. del Estado?” Acude a una ventanilla, a un escritorio, el mostrador, con aquella persona, con el guardia apostado en la puerta… le dicen: “Espere aquí en las bancas, en un momento la atiende un encargado de archivo”. Gracias.

Toma asiento, su mirada recorre el vetusto edificio, las paredes descoloridas, las columnas… su mirada se fija en un cuadro, el marco contiene una foto en blanco y negro, se acerca… un viejo automóvil estacionado afuera de una casona; por encima de la cornisa se lee: “Unión de Valuadores Adscritos al Estado de Jalisco 1931”. Algo muy extraño pasa en su mente… esa casona le es familiar… ya la había visto antes. “¿En qué le puedo servir? Esta foto… ¿En dónde está ubicada esta casona? “mhh, no le sé decir, la directora del archivo sabría…” “Esa casona fue demolida hace 40 años” Le dice sin verla, la encargada de la limpieza que en ese momento estaba allí barriendo… “En su lugar se construyó un hospital, pero no recuerdo el nombre…”. Gracias. Se retira más confundida… cansada.

Empiezo a sentir debilidad, estoy a unas semanas de traspasar la línea de no retorno. Me da miedo morir… ¿Qué es todo esto? Toma una vieja cadena engarzada de oro de 14 quilates que perteneció a su madre y acude con el valuador más viejo que pudo encontrar en el centro de la ciudad. Le decían Max y estaba su taller en la calle de Pedro Loza No. 129 entre las calles de Independencia y Juan Manuel. Después de ponerle los ácidos a la cadena… ella le pregunta: “¿Usted perteneció a la Unión de Valuadores Adscritos al estado?

Max la mira con curiosidad, pues él portaba lentes oscuros… después de varios segundos: “Usted se parece a Karen Marroquí… Lizardi, la que fue secretaria de la Unión… Sí, yo estuve afiliado. ¿Qué fue de ella? “Hubo un escándalo, pues se perdieron lingotes de plata… cambio de sede y la finca fue demolida. Allí se construyó el “Hospital de la Luz” a principios de los años 30s. (Calles 5 de febrero y Río Suchiate atrás antigua central camionera) Asombrada lo interrumpe “¡Yo nací allí!”. En ese hospital falleció la señorita Karen, pero no supe cómo ni cuándo.

¿Usted es su familiar? No, es que tengo una foto del cambio de personal con fecha de 1929. “En otra vuelta que se dé, me gustaría ver esa foto… yo estuve en esa ceremonia; yo tenía 22 años y era un aprendiz”. “Su cadena es de oro… ¿La quiere vender?” No, gracias.

La leyenda registra que el ferrocarril llegó a Guadalajara en mayo de 1888. La estación estaba por la calle Colón, zona de las nueve esquinas. Al paso del tiempo, por disposición oficial el convoy traía mercancías, productos, pasajeros y… valores. Conforme las vías férreas conectaban con más regiones, un vagón en especial transportaba exclusivamente costales con monedas, pacas de billetes, mineral, piedras preciosas, documentos bancarios, lingotes de oro y plata; los cuales discretamente se trasladaban a Palacio de Gobierno para su fiscalización y de allí al banco.

Era oficial: se enviaban muestras aleatorias a la sede de valuadores orfebres para autentificar la carga. En una ocasión, por error administrativo, se enviaron veinte lingotes de plata ley 999.9 a la Unión. Su director, el contador público Lic. David Iturbide Mondragón, a las 48 horas de recibido, se dio cuenta que no se registró su salida de Palacio de Gobierno. La codicia que es mala consejera, le dictó esconder la pesada carga en una recóndita habitación de la vieja casona. Su secretaria (posteriormente su amante) Srita. Karen Marroquí Lizardi supo y confió de este hecho por parte del licenciado y la hizo su cómplice.

Con el producto monetario de esa plata podrían vivir holgadamente por años… pero, ¿Cómo sacarlos? Había un filtro laxo en la puerta y el volumen tanto como el peso los delataría. Tal hecho se tipifica como robo al Gobierno Federal y las penas son máximas. Durante horas el Lic. Iturbide pensó como hacerle, e ideó traer desarmado una segueta de joyería. Corto cada lingote discretamente “en rebanadas de ½ centímetro” y así trasladarlas en el bolso de ella. Karen se negó. “Si me descubren jamás saldré de la cárcel”.

Como mujer “encontró un lugar seguro”. Envolvió tres rebanadas de plata en tela de gasa (no existían las bolsitas de plástico) y se las introdujo en su zona íntima. El natural PH y la humedad propia de la cavidad vaginal remojo, junto con el ambiente alcalino dejando al descubierto parte del metal que contacto con las paredes uterinas ocasionando una toxicidad que se degradaba y traspasaba vía ósmosis con envenenamiento paulatino del organismo. Así, con esa operación diaria, pasaron varias semanas.

Se descubrió el faltante, pero jamás se encontraron los lingotes. Por ello, se dio el cambio de administración, y al poco tiempo cambió de sede. La investigación quedó abierta. La casona fue demolida en 1931 y el predio fue puesto en venta. Karen y el Lic. Iturbide siguieron viviendo aquí para no despertar sospechas y al tiempo ella quedó embarazada. Por aras del destino y con un recién estrenado hospital en 1934 en el mismo lugar donde estuvo la U. V. A. al Estado, Karen da a luz a una niña; presa de violentas convulsiones Karen Marroquí Lizardi, fallece a las horas de parir.

Marzo de 1977, triste y postrada de hinojos… sola, le habla a su fallecida y recién sepultada madre. Se enfrasca en un largo monólogo y pregunta: “¿Por qué guardabas esas fotos?” Llora desconsolada, cansada, frustrada con su cabeza inclinada. Aun sollozando eleva su mirada, e inmediatamente atrás de la tumba de su madre, a su derecha hay otra tumba en cuya lápida se lee: “Aunque no fuiste mi hija de sangre, yo te amé con todo mi corazón”. Poco a poco deja de llorar… se retira de allí sin saber qué hacer.

Ya sin poder trabajar a causa de sus males, es asistida por una amiga vecina en su improvisada y temporal casa. Recibe una llamada: “Que bueno encontrarla, le tengo resultado a su estudio genealógico, pero le advierto que asimile con calma lo que le diré” “Si… le escucho…”. “Usted fue adoptada al nacer… Su abuela materna se llamaba Karen Marroquí Lizardi. Ella falleció en la cama del hospital en 1934 a causa de convulsiones y dificultad para respirar… dejó una hija; es decir, su madre biológica quien falleció al dar a luz en diciembre de 1956 por las complicaciones de una enfermedad llamada “Argiria”. Ese día en el hospital, la mujer que la adoptó, le habían practicado una histerectomía. El trámite de adopción se hizo rápido y… ¿me escucha? “Alo, alo…” Lo intuía y los estragos de la anemia en ese momento la desvaneció. ¿Se enteró de lo que le dijo el investigador? …ya no era importante. La codicia arrastró a tres vidas enlazadas por la sangre. La muerte siempre dispone de misteriosas maneras de arrebatar la existencia de quien sea… es el misterioso plano de la muerte… una directriz que siempre se cumple.

Se afirma que la Psicogenealogía carece de bases científicas. ¿Sera? o tal vez la psicogenealogía y la muerte, también conocida como “Caronte”; tienen un pacto… un misterioso pacto que está fuera del entendimiento humano, o usted… Agraciada lectora… atento lector ¿Qué opina?

El Misterioso plano de la muerte.

Autor: Carlos Martínez Valadez, diciembre de 2023.

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Próxima quincena: La Arquitectura del diablo.

*La Psicogenealogía, es una teoría de Alejandro Jodorowski que no ha acabado de aterrizar por las manifestaciones soberbias y excéntricas de su autor, quien considera que la Psicogenealogía explica todos los males de la humanidad (Freud planteó lo mismo, con su teoría a la interpretación de los sueños) y en la que afirma que algunos recuerdos se trasladan vía genética y que se interpretan como “Deja Vu”. En realidad la causa que origina estas vivencias es otra. En la actualidad Alejandro Jodorowski vive convencido de su teoría, pues su postura ortodoxa no le permite vislumbrar otras explicaciones.

**La plata, y/o el nitrato de plata es un poderoso desinfectante. Su contacto directo y prolongado con las células orgánicas hidratadas altera el funcionamiento progresivamente sin degenerar en cáncer. La enfermedad más conocida por infecta de plata se conoce como Argiria y no es fatal en sí; pero el embarazo activa y acelera sus efectos nocivos ante la transferencia de genes y nutrientes al embrión. Sus síntomas son dificultad para respirar, colapso orgánico, convulsiones. La muerte se asienta en el organismo desde unos meses hasta algunos años. La naturaleza es sabia, y dispone que toda portadora de plata debe morir para no seguir dispersando este metal a otras generaciones.

***La herencia genética se traslada o se transfiere siempre de los abuelos maternos o paternos a los nietos, de allí su parecido fisonómico familiar en las facciones, color de ojos, tipo de piel y cabello. Es involuntario y hay una tendencia a que la receptora sea mujer; según sea el gen predominante.

****Existen especialistas en la lectura del árbol genealógico y entre varios sistemas de investigación, la más socorrida lo es la de “Sosa-Stradonitz”. En base a este estudio se puede descubrir un diagnóstico de enfermedades a manifestarse en el presente. Estos resultados facilitan la identificación de síndromes, síntomas o padecimientos específicos. Lo cual deriva en prevenir las probabilidades de herencia genética orgánica.

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